domingo, 30 de agosto de 2009

Seguimos observando



Nuestra segunda experiencia de observación fue en un primer año de Polimodal del Colegio del Carmen. El módulo duró 80 minutos. El tema dictado fue: La oración compuesta y compleja.


Observación II

La clase comenzó con una lluvia de ideas sobre los nexos coordinantes. En su mayoría, los alumnos participaron y se mostraron interesados en el tema. Notamos rápidamente, el manejo de grupo por parte de la docente.
Luego, la profesora preguntó sobre los ejercicios de oraciones en la clase anterior y pidió a una alumna que escribiera la oración en la pizarra y la analice, indicando el nexo y su relación entre las proposiciones. Frente a esto, la alumna respondió de manera positiva y efectiva.
Después, la docente interrogó a los alumnos sobre los demás ejercicios quienes se ofrecieron y respondieron sin problemas. Sin embargo, no se respetaron los turnos para hablar, por lo cual, la docente priorizó a quienes se mostraron interesados en el tema.
Luego de esto, la profesora destacó una y otra vez que las proposiciones coordinadas tienen autonomía semántica y dependencia sintáctica.
Seguidamente, la docente hizo leer a los alumnos una oración y pidió que la analicen y reflexionen sobre el análisis. Los alumnos respondieron favorablemente aunque no todos, en su mayoría hablaron y se dispersaron. Esta cuestión se enfatizó cuando la docente analizó la oración en el pizarrón sin intervención de los alumnos. Sin embargo, la docente no permitió el bullicio y pidió a los alumnos que le dicten las proposiciones que encontraron en el texto de la clase anterior. Luego, les pidió que las analicen y destaquen la relación entre proposiciones. Los alumnos participaron en los análisis de oraciones, atentos, porque en la próxima clase tendrán trabajo práctico. Luego, la docente dictó los temas del T.P.
A continuación, la docente dictó las actividades que los alumnos debían realizar en la carpeta y resolverlos durante la clase. Durante este lapso, la profesora acompañó a los chicos y los hizo reflexionar sobre el sentido de la oración para poder distinguir una oración principal de otra secundaria.
Para finalizar, recomendó a los alumnos una serie de pasos que deben tener en cuenta al momento de realizar un análisis. Destacó también, la relación que se establece entre las proposiciones y el nexo que las coordina.

En este curso, pude observar la participación de los alumnos, el interés que despiertan si algo les llama la atención. Me alegra saber que los chicos se interesan por la materia, es gratificante trabajar de ese modo.

Observamos nuestro recorrido...

La primera etapa que se nos plantea es la observación de clases en diferentes niveles educativos. Este período lo realizaremos de manera grupal, en mi experiencia me acompañará mi compañera y amiga Stella.


Observación I

El primer curso observado fue 8vo año de EGB del Colegio del Carmen. La clase duró un módulo de 80 minutos. El tema dictado fue lectura y revisión de tipología textual.
Desde un principio, al entrar la profesora y saludar a los alumnos, pude recordar esos momentos en el que era alumna, fue una extraña sensación la que me invadió, pero a su vez no pude evitar la satisfacción de poder ver una clase desde otra postura, con otros conocimientos.
La clase comenzó con una lluvia de ideas sobre las características y tipos de cuentos. Los alumnos respondieron favorablemente a todo lo que le preguntaba la docente. Esta cuestión participativa, me llamó muchísimo la atención, durante la clase observé la dinamicidad de los alumnos quienes se caracterizaron por ser extrovertidos y con un conocimiento general más profundo de lo que pensaba.
Luego, la profesora anunció la lectura de un texto y pidió a los alumnos que la acompañen de manera silenciosa. Observamos que los alumnos, en su mayoría, seguían a la profesora pero otros no le prestaban demasiada atención lo que creaba dispersión entre sus compañeros.
En medio de la lectura, la docente realizó un diálogo dirigido en relación al contenido de la lectura. Creo que utilizó esta estrategia para comprobar si los alumnos seguían la lectura aunque no me pareció viable, pues quienes sí respondían al diálogo dirigido eran los alumnos que prestaban atención a la clase.
La docente realizó este patrón dos veces más sin encontrar una respuesta positiva.
Luego de la lectura, anunció a los alumnos que debían realizar las actividades de la página 67 del libro Manual Santillana II Antología de la editorial Santillana. En esta parte de la clase los alumnos se mostraron aburridos por lo cual se dispersaron y conversaron creando indisciplina. Este hecho se acentuó aún más cuando la profesora anunció de manera verbal las notas del Integral.
Después, la docente interpeló a los alumnos sobre cuestiones de la actividad, a lo que los alumnos respondieron favorablemente, demostrando de esta manera, que no se les planteaba ningún obstáculo que demande un trabajo intelectual mayor.
Después de la actividad, la docente leyó un cuento fantástico que los alumnos ya conocían y les gustaba mucho. En un principio, los alumnos prestaron atención pero luego de un tiempo se mostraron inquietos. Entonces, la docente retomó el diálogo dirigido pero al no tener una buena respuesta por parte de los alumnos, les pidió que lean cada uno una oración. Observamos entonces que los jóvenes leen relativamente bien, lo hacen de corrido y parecen comprender lo que leen.
Para finalizar, la profesora realizó un cierre de la clase destacando los temas vistos.

En esta primera observación, pude advertir que los alumnos son extrovertidos, les interesa lo que hace el profesor, son participativos y poseen un conocimiento global sobre diferentes temas. Por esta razón, necesitamos plantearles a los chicos una clase que desafíe sus competencias y los motive a querer aprender.



miércoles, 26 de agosto de 2009

El primer paso...

¡Bienvenidos a este espacio! Quisiera inaugurarlo con un bello poema, no les voy a decir quién lo escribió, eso deben decírmelo ustedes si les interesa… De todas maneras, disfrútenlo.

Te pienso desde aquí. Soy una herida.

Desde el sueño me llamas para verte

y un recuerdo pregunta por tu nombre

y es poco un corazón para quererte.


Hoy mi horizonte cabe en el pañuelo

que, en las aristas mismas del ayer,

bebió el adiós ahogado por las lágrimas,

donde quedó tu grito sin nacer.


Supone lo que acaso no dijimos

mi voz que se educó para nombrarte.

¡Recuerdo cuando aún bajo la sombra

de la lluvia cautiva de los sauces,

mi beso te cerraba las palabras

pues quedaba la astilla de una tarde!